El alcalde de Taipéi calificó el jueves de héroe al piloto de un avión de TransAsia Airways que se estrelló en un río en su intento por evadir edificios, lo que probablemente evitó un desastre mayor, reseña Reuters.
Al menos 31 personas murieron cuando el vuelo GE235, buscando evitar impactar edificios, pasó a llevar un taxi y un paso sobre nivel con una de sus alas y se estrelló de cabeza en aguas poco profundas después de despegar el miércoles de un aeropuerto en la capital taiwanesa.
Hubo 15 sobrevivientes y 12 personas aún están desaparecidas. El avión se dirigía a la isla taiwanesa de Kinmen.
“Realmente intentó todo lo que pudo”, comentó el alcalde de Taipéi, Ko Wen-je, sobre el piloto, con su voz quebrada por los sollozos.
El piloto y copiloto del avión turbohélice ATR 72-600, casi nuevo, figuran entre los fallecidos, dijo el regulador aeronáutico taiwanés. TransAsia identificó al piloto como Liao Chien-tsung, de 42 años.
La última comunicación de uno de los pilotos fue “Auxilio, se apagó un motor”, según una grabación de control de tránsito aéreo en liveatc.net.
Un motor puede apagarse cuando el suministro de combustible es interrumpido o cuando existe una falla de combustión, pero la aeronave de dos motores generalmente puede seguir volando con sólo uno de ellos funcionando.
Un video de un aficionado grabado por una cámara localizada en el parabrisas de un auto mostró cómo el avión evitó por poco las edificios cerca del aeropuerto Songshan de Taipéi antes de estrellarse en el río.
“La reacción inmediata del piloto salvó a muchas personas”, dijo Chris Lin, hermano de uno de los sobrevivientes.
“Yo fui piloto y sé bastante sobre la reacción inmediata necesaria en este tipo de situaciones”, agregó.
Analistas aeroespaciales dijeron que era demasiado pronto para decir si los pilotos elevaron intencionalmente el avión por sobre los edificios y notaron que la tripulación pudo haber apuntado hacia el río para reducir la cantidad de víctimas fatales.
Un panorama más concluyente sólo saldrá a la luz cuando las autoridades entreguen los detalles de las grabadoras de datos y voz de la cabina del avión, que fueron recuperadas el miércoles.
“Evitó los edificios, pero es prematuro hacer un análisis de lo que pasó en este vuelo. Tenemos que esperar a los datos de la grabadora de voz de la cabina y los datos de vuelo”, dijo el analista de aviación Geoffrey Thomas, editor jefe de airlineratings.com.
Las acciones de TransAsia cerraron con una baja de 6,9 por ciento el miércoles, su mayor declive porcentual desde fines de 2011, y cayeron otro 3,3 por ciento el jueves.
El accidente fue el más reciente de una serie de desastres aéreos en Asia en los últimos 12 meses y el segundo de TransAsia en los últimos siete meses.
Un funcionario de TransAsia dijo que la aerolínea daría a la familia de los fallecidos 1,2 millones de dólares taiwaneses (38.198 dólares) para gastos funerarios y 200.000 dólares taiwaneses a cada uno de los heridos. Dos transeúntes también resultaron heridos, afirmó la aerolínea.