Una balacera entre el ejército mexicano y presuntos narcotraficantes dejó un saldo de por lo menos 12 muertos, incluidos dos soldados.
Según funcionarios, los pistoleros usaron granadas y armas automáticas para emboscar una patrulla militar en el estado de Sinaloa.
Refuerzos militares y policías se apresuraron a la zona con un helicóptero.