La viuda del ex presidente francés François Mitterrand, Danielle, murió la pasada madrugada a los 87 años tras ser hospitalizada el pasado viernes para ser tratada de una anemia, según confirmaron varias personalidades próximas.
Danielle Mitterrand, viuda desde comienzos de 1996, era conocida por sus posiciones marcadamente izquierdistas, su amistad reivindicada con el líder cubano Fidel Castro y su implicación pública en su fundación Francia Libertades.
Su imagen estuvo estrechamente asociada a su marido (jefe del Estado entre 1981 y 1995), con el que se casó en 1944 y al que apoyó durante su amplia vida política y también en los momentos difíciles cuando la prensa reveló durante su presidencia la existencia de una hija fruto de una relación extraconyugal, Mazarine, a la que el líder socialista mantuvo en secreto durante años.
Durante el tiempo en que fue primera dama de Francia se resistió a quedar encorsetada en el papel tradicional de esposa del presidente de la República y creó en 1986 Francia Libertades, que le sirvió como plataforma para su acción por los derechos humanos y como tribuna pública.
Esta fundación tiene como objetivo establecer "una red mundial que aspire a organizar una alternativa a la globalización del comercio y de las finanzas por una sociedad que de todas sus oportunidades a la vida".
Entre las primeras reacciones a este fallecimiento, el que fuera ministro de Cultura de Mitterrand, Jack Lang, recordó en la fallecida su "amiga, una mujer con la que se podía hablar francamente, sin contenerse".
"Danielle era a la vez una mujer valerosa" y mostró "una fidelidad total hacia François Mitterrand", incluso cuando se hizo pública la existencia de Mazarine, cuando puso en evidencia su "dignidad" y su "clase", señaló Lang en declaraciones a la emisora "France Info".
Otro socialista conocido por su proximidad a los Mitterrand, el diputado Henri Emmanuelli, dijo también en "France Info" tener una "gran tristeza" al haber conocido la noticia del deceso de esta mujer, "muy comprometida" y "con una personalidad muy fuerte".
Danielle Mitterrand, viuda desde comienzos de 1996, era conocida por sus posiciones marcadamente izquierdistas, su amistad reivindicada con el líder cubano Fidel Castro y su implicación pública en su fundación Francia Libertades.
Su imagen estuvo estrechamente asociada a su marido (jefe del Estado entre 1981 y 1995), con el que se casó en 1944 y al que apoyó durante su amplia vida política y también en los momentos difíciles cuando la prensa reveló durante su presidencia la existencia de una hija fruto de una relación extraconyugal, Mazarine, a la que el líder socialista mantuvo en secreto durante años.
Durante el tiempo en que fue primera dama de Francia se resistió a quedar encorsetada en el papel tradicional de esposa del presidente de la República y creó en 1986 Francia Libertades, que le sirvió como plataforma para su acción por los derechos humanos y como tribuna pública.
Esta fundación tiene como objetivo establecer "una red mundial que aspire a organizar una alternativa a la globalización del comercio y de las finanzas por una sociedad que de todas sus oportunidades a la vida".
Entre las primeras reacciones a este fallecimiento, el que fuera ministro de Cultura de Mitterrand, Jack Lang, recordó en la fallecida su "amiga, una mujer con la que se podía hablar francamente, sin contenerse".
"Danielle era a la vez una mujer valerosa" y mostró "una fidelidad total hacia François Mitterrand", incluso cuando se hizo pública la existencia de Mazarine, cuando puso en evidencia su "dignidad" y su "clase", señaló Lang en declaraciones a la emisora "France Info".
Otro socialista conocido por su proximidad a los Mitterrand, el diputado Henri Emmanuelli, dijo también en "France Info" tener una "gran tristeza" al haber conocido la noticia del deceso de esta mujer, "muy comprometida" y "con una personalidad muy fuerte".
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