Una serie de inusuales enfrentamientos entre las fuerzas de seguridad y los rebeldes estalló ayer en un vecindario exclusivo del oeste de Damasco, donde se encuentran las embajadas y residencias de funcionarios de alto rango.
Al menos tres personas murieron en el que es considerado uno de los combates más intensos en la fuertemente custodiada capital del país desde el inicio del levantamiento, hace un año, en contra del régimen del presidente de Siria, Bashar al Asad.
El choque fue un despliegue de fuerzas por parte de los insurgentes, quienes recientemente sufrieron varios reveses al ser expulsados de los bastiones en la ciudad de Idlib, en el norte del país, y en la céntrica urbe de Homs. Los combatientes demostraron que pueden atacar en el corazón de la vigilada capital.
El Observatorio Sirio de Derechos Humanos, con sede en Gran Bretaña y una red de activistas en toda Siria, dijo que 18 soldados de las fuerzas de Al Asad resultaron heridos en los enfrentamientos. Calificó los choques “como los más violentos de su tipo y los más próximos a los centros de seguridad en Damasco desde que estalló la revuelta”.
Por lo general, Damasco no ha registrado los tiroteos y asesinatos que se reportan a diario en el resto del país desde que inició la revuelta que busca derrocar a Al Asad. Pero la capital ha sido escenario de varios ataques con explosivos contra edificios de agencias de seguridad del Estado, el más reciente ocurrido el sábado.
El Gobierno atribuye a “terroristas” los atentados que han tenido lugar en el país, pero la oposición asegura que son obra del régimen mismo para desacreditar la revuelta. Las autoridades de Estados Unidos han insinuado que la red Al Qaeda podría estar incorporándose a la lucha en Siria.
Comisión de la ONU
Los combates en Damasco sucedieron pocas horas después de que un equipo del enviado de Naciones Unidas y la Liga Árabe, Kofi Annan, llegó a la capital, de acuerdo con un vocero de Annan, Ahmad Fawzi. Agregó que la delegación está en contacto con funcionarios de la Cancillería siria y que discutirá las maneras de implementar las propuestas de Annan para poner fin a la crisis.
En una visita reciente a Damasco, Annan presionó por un cese al fuego inmediato que permita que todas las partes sostengan un diálogo para llegar a una solución política. El Gobierno sirio respondió en una carta a Annan que está “interesado en terminar con la violencia”, pero insistió que los rebeldes deben entregar sus armas antes.
La agencia estatal de noticias Sana reportó que la lucha de este lunes se desató cuando las fuerzas de seguridad ingresaron a un apartamento que era usado como escondite por un grupo “terrorista armado” en el distrito occidental de Mazzeh. El reporte dice que las fuerzas de seguridad mataron a dos de los rebeldes y arrestaron a un tercero, mientras uno de sus efectivos murió.
Iniciativa del Cicr
De otra parte, Rusia se comprometió a apoyar la petición del Comité Internacional de la Cruz Roja (Cicr), para que se impongan treguas de dos horas diarias durante los combates en Siria y poder asistir así a la población civil.
“Nos hemos asegurado el apoyo de (el canciller de Rusia), Serguéi Lavrov, a la necesidad de altos el fuego diarios de dos horas en los combates”, afirmó Victoria Zotikova, portavoz de la delegación regional del Cicr.
“Seguimos apoyando a todos los que necesitan ayuda en las ciudades donde hay disturbios. Esperamos ver resultados concretos para nuestras actividades en Siria en los próximos días o semanas”, declaró Zotikova.
La iniciativa estipula también el cese de la violencia, la creación de un mecanismo neutral que supervise el alto el fuego, la no intervención extranjera y el apoyo a la mediación de Kofi Annan.
Respaldo a Annan
El Consejo de Seguridad de la ONU abordará hoy la propuesta de Francia de respaldar mediante una declaración presidencial las gestiones de Kofi Annan.
El presidente del Consejo y embajador del Reino Unido, Mark Grant, señaló que, además de la declaración, Rusia “ha hecho circular una propuesta sobre los recientes ataques en Damasco y Alepo”.
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