La baja de Ricky Rubio comienza a ser asimilada por los Timberwolves de Minnesota que llegaron al US Airways Center, de Phoenix, y ganaron por 124-127 al equipo local de los Suns, que rompieron racha de tres triunfos consecutivos.
El ala-pívot Kevin Love volvió a ser el líder indiscutible de los Timberwolves al conseguir 30 puntos, incluidos 13 en el cuarto periodo, y siete rebotes.
El pívot montenegrino Nikola Pekovic con 24 puntos y ocho rebotes también fue factor ganador para los Timberwolves (22-21), que rompieron racha de dos derrotas consecutivas y vuelven a tener marca ganadora.
El triunfo, que también acabó con racha de nueve derrotas seguidas en sus visitas a Phoenix, tuvo doble valor para los Timberwolves al haberlo conseguido frente a un rival que también lucha por ocupar el octavo puesto de la Conferencia Oeste que les permita estar en la fase final.
El alero novato Derrick Williams comienza a tener su mejor rendimiento desde que llegó a la NBA y aportó 19 puntos, que lo dejaron como el tercer máximo encestador del partido.
Los reservas, el ala-pívot Michael Beasley y el escolta Wayne Ellington, aportaron 15 puntos cada uno y formaron parte de los seis jugadores de los Timberwolves que tuvieron dobles dígitos.
Ridnour toma la batuta de Rubio
La dirección de juego de los Timberwolves tuvo como responsable al base Luke Ridnour, que respondió con 10 puntos y nueve asistencias, y al reserva puertorriqueño J.J. Barea, que en sólo 15 minutos que estuvo en el campo continuó con la labor de su compañero.
Barea aportó tres puntos al anotar 1 de 3 tiros de campo, falló un intento de triple, y acertó 1 de 4 desde la línea de personal, pero repartió ocho asistencias y capturó tres rebotes.
La combinación de Ridnour y Barea, que volvió con el equipo después de haberse perdido dos partidos con un esguince del tobillo izquierdo, superó en la dirección del juego a las 10 asistencias que aportó el base canadiense Steve Nash para los Suns.
Nash logró un doble-doble al anotar 25 puntos, pero al final no pudo ser factor ganador para su equipo ante la excelente labor de equipo de los Timberwolves.
El escolta Jared Dudley siguió en la línea de ser el jugador más en forma del ataque de los Suns (19-22) al anotar 28 puntos, mientras que el ala-pívot Channing Frye llegó a los 18 tantos.
El base Sebastian Telfair anotó seis puntos en siete segundos -convirtió una jugada de cuatro tantos y un robo con penetración a canasta- que permitieron a los Suns ponerse con la ventaja parcial de 111-107 a falta de 6:38 minutos para el final del partido.
Pero los Timberwolves reaccionaron y con canasta de Ridnour recuperaron la ventaja 120-121, que fue la definitiva cuando quedaban 1.50 minutos del tiempo reglamentario.
Los Timberwolves anotaron seis tiros de personal, los dos últimos del escolta Wesley Johnson con 10 segundos por jugarse, y aseguró el parcial de 122-127, que dejó sin efecto la canasta antes del pitido final que logró el pívot polaco Marcin Gortat.
No hay comentarios:
Publicar un comentario