Los diez uniformados liberados este lunes por las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) después de varios años de secuestro llegaron a Bogotá alrededor de las 19.05 hora local, en donde fueron recibidos por altos mandos de seguridad del Estado.
Los policías y militares viajaron desde el aeropuerto de La Vanguardia en Villavicencio hasta la base militar Comando Aéreo de Transporte Militar (Catam) en aviones de la Policía Nacional y de la Fuerza Aérea.
Una vez en la base, los liberados se reunieron con sus familiares. En la capital colombiana, los hombres serán sometidos a exámenes médicos para conocer el estado de salud en el que se encuentran.
En una operación liderada por la Cruz Roja que duró más de cinco horas, las FARC liberaron a los últimos uniformados que permanecían en cautiverio. El presidente del país, Juan Manuel Santos, dijo que "valoraba el gesto" de las FARC pero que era necesario continuar con la liberación de los restantes rehenes civiles.
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