“(El lunes) me operaron. Me hicieron una pequeña incisión. Tengo cuatro tornillos por fuera, para unir el hueso como tal, y adentro un tornillo, pues por la inflamación, el doctor no pudo ponerle la plaquita y faltaría de una a dos operaciones”, cuenta el cantante y compositor en entrevista telefónica desde el Centro Médico de Río Piedras. “El Abayarde”, como se le conoce también al exponente, narra que la piscina de la hospedería es bien llana para la altura de la chorrera, por lo que su caída fue fuerte. Además, le sorprendió que el lugar no cuente con salvavidas y servicio de ambulancia. “Fue una experiencia triste pa’ mí por los nenes porque era tiempo para disfrutármelos”, sostiene acerca de sus cuatro hijos. A preguntas de este diario sobre si contempla demandar al hotel, prefirió no abundar al respecto. Reconoció que su agenda de trabajo y el lanzamiento de su álbum El que sabe, sabe se verán afectados. “A pesar del estereotipo de los hospitales públicos, mi papá viene de aquí; aquí hay muy buenos doctores y me han tratado de maravilla y me siento que estoy en buenas manos”, acotó.
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