La reconocida cardióloga de Los Ángeles, Noel Bairey Merz, subrayó que actualmente mueren más mujeres que hombres de enfermedades cardiovasculares cada año, incluso en Puerto Rico, pero que aun así las investigaciones en ese campo se han enfocado por años solo en los hombres.
Bairey Merz, directora del Barbra Streisand Women’s Heart Center en California, señaló que esta tendencia, que se ha ido manifestando durante los últimos 20 años, puede tener su raíz en que los patrones de las enfermedades del corazón se presentan de forma distinta en hombres y mujeres.
“Creemos, debido a las investigaciones, que una de las razones principales es que cuando las mujeres tienen enfermedades del corazón, se ven diferentes al patrón masculino”, expresó la también profesora del Cedars Sinai Heart Institute.
Las expresiones de la doctora Bairey Merz se produjeron durante una conferencia con médicos especialistas en enfermedades cardiovasculares que la Sociedad Puertorriqueña de Cardiología organizó en una hospedería de San Juan como parte de sus actividades con motivo de la celebración del Día Mundial del Corazón que se celebra este sábado, 29 de septiembre.
La especialista explicó que como resultado de las investigaciones se le ha propuesto a los especialistas en enfermedades cardiovasculares que se trate médicamente a las mujeres según las mismas guías de tratamiento que se aplican a los hombres para que puedan hacer un diagnóstico correcto.
“Los dolores de pecho se manifiestan de manera diferente en hombres y mujeres. Es importante que la mujer esté consciente de eso y que la comunidad médica también. Si los tratamos de acuerdo a las guías que ya están establecidas, los índices de mortalidad en la mujer van a bajar, de hecho eso se está viendo, pero no hemos llegado al punto que queremos”, indicó, por su parte, María Ríos, vicepresidenta de la Sociedad Puertorriqueña de Cardiología.
Las doctoras explicaron que en el caso de los hombres, las enfermedades cardiovasculares se presentan, por lo general, con dolores de pecho retroesternal severo, que usualmente se produce con el ejercicio.
“Generalmente, se les quita con descanso, tienen la sensación de que se están muriendo y la mujer muchas veces tiene el dolor como indigestión, como molestia, algunas veces ocurre de noche, no necesariamente es con el ejercicio”, argumentó Ríos.
Bairey Merz dijo que esta diferencia en los patrones de manifestación de enfermedades cardíacas en las mujeres puede atribuirse a razones tan simples como que “las mujeres poseen mayor conciencia corporal”.
“Sentimos las cosas más rápido y le comunicamos a la gente cuando sentimos dolor. Podemos decirle al doctor: ‘tengo dolor aquí, tengo dolor acá o aca’ y el doctor se confunde. La mujer siente más y no es precisa”, mencionó.
“La segunda razón es que, en promedio, la mujer tiene pequeños ataques al corazón y no son tan dramáticos o tan explosivos, aunque son igualmente fatales. Entonces es difícil para el doctor reconocerlo cuando es más sutil”, agregó la invitada.
Por otro lado, Bairey Merz indicó que en términos de prevención, “las recomendaciones para las mujeres, afortunadamente, siguen siendo las mismas que para los hombres: no fumar, hacer ejercicio, llevar una dieta sana para el corazón, prevenir la obesidad e ingerir solo una porción de alcohol, no más de eso, y solo aquellas personas que no tenga contraindicación”.
Esa porción de alcohol debe ser 12 onzas, si es cerveza, dos onzas si es vodka o cualquier otro licor fuerte y seis onzas si es vino.
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