Un hombre mató a su exnovia y luego intentó quitarse la vida de un disparo, en un hecho ocurrido en la comunidad Hoya Grande. La fallecida fue identificada como María Teresa Cruz Núñez, de 22 años, mientras se encuentra en estado crítico su matador Joel Báez Herrera de 23. La tragedia mantiene consternados a los residentes de esa comunidad, debido a que ambos eran prácticamente vecinos.
Los médicos que atienden a Báez Herrera indican que este permanece clínicamente muerto.
En otra ocasión el agresor también había intentado quitarle la vida a su expareja, según denunciaron sus familiares, por lo cual había sido sometido judicialmente.
Este hecho se suma a la cadena de feminicidios que ya ha cobrado la vida de 142 mujeres en todo el país.
Crimen sin castigo
A estos hechos se suman las constantes amenazas a la familia de Teresa del Carmen Martínez Bueno, la mujer de 28 años asesinada el pasado 17 de septiembre por su expareja sentimental, lo que no le ha dejado espacio ni para llorar la muerte de su pariente.
Y es que a 21 días del horrendo crimen ocurrido en el barrio Nueva York Chiquito del sector Nibaje, el agresor, identificado como Evaristo Escolástico Ortega, continúa prófugo.
Dicen que desde hace varios días siguen recibiendo amenazas de muerte por parte de Ortega, quien le propinó 25 puñaladas, molesto porque esta se negaba a la reconciliación.
Margarita Bueno, madre de la víctima, lamenta que las autoridades sean deficientes en la persecución del matador de su hija, quien dejó tres hijos en la orfandad.
“Lo que estamos viviendo es una tragedia. Ni en este momento de dolor estamos en paz, porque el matador de mi hija sigue amenazándonos si continuamos con la querella en su contra”, expresa Margarita Bueno.
En lo que va de este año son ocho las mujeres asesinadas por sus exparejas sentimentales tan solo en la provincia de Santiago.
La misma situación de temor enfrenta Grisel Eloísa Bonilla Vélez, la mujer que el pasado domingo 23 de septiembre fue lanzada desde el cuarto piso de un edificio tras recibir una paliza a batazos, la cual ya comienza a articular palabras. Debido a los golpes propinados por Jaime Emilio Germosén, la agredida permaneció por varios días en el hospital.
Familiares de víctimas temen represalias
Familiares de víctimas temen que cuando los agresores salgan de la cárcel tras cumplir prisión preventiva puedan matar a las sobrevivientes, como ha sucedido en otros casos. A las agresiones padecidas por féminas se suma el caso de una mujer haitiana embarazada agredida a martillazos por su esposo, en un hecho ocurrido en Matanzas, Santiago. La víctima fue identificada como Querida Reyes y presenta varios golpes en distintas partes del cuerpo.
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