Increíble, pero cierto. En las Grandes Ligas, "cubano" es una marca.
Sino, ¿cómo se explica el contratazo que los Dodgers de Los Ángeles le
acaban de dar al prospecto Yasiel Puig? ¡42 millones de dólares por
siete temporadas!
Todos los reportes señalan a Puig, de 21 años, como un jugador completo, con las cinco herramientas, e incluso hay quienes afirman que el cubano estará listo para debutar en Grandes Ligas esta misma campaña, para ayudar a los Dodgers en los playoffs.
No es que no sea posible. Pero, ¿no hay acaso en República Dominicana,
Puerto Rico o Venezuela jugadores de su mismo calibre, con
características similares e igual edad?
Sin embargo, es hasta muy probable que a un joven quisqueyano ya ni lo
firmen como profesional a los 21 años, con todo y el talento que pueda
tener.
Son las cosas increíbles del béisbol. En los últimos años han llegado a las Mayores unos cuantos jugadores cubanos, favorecidos con grandes contratos, aunque no siempre demostraron merecer tanto dinero.
Uno que ha justificado cada dólar que le han pagado los Yankees de Nueva York a lo largo de toda su carrera es Derek Jeter.
El capitán de los Yankees disparó el jueves un hit en cinco turnos y con ese cañonazo igualó a Cal Ripken Jr. en el decimocuarto lugar de todos los tiempos en imparables, con 3,184.
Por su parte, su compañero Alex Rodríguez, sonó dos hits en cuatro oportunidades e igualó a Brooks Robinson en el escalón 44 de todos los tiempos, con 2,848.
Sin embargo, los festejos de Jeter y A-Rod por semejantes marcas se vieron empañados por una derrota de los Yankees 4-3 ante los Medias Blancas de Chicago.
Nueva York ganaba 3-1 cuando a la hora de recoger los bates, el cubano Dayán Viciedo le botó la pelota con dos hombres en bases al relevista David Robertson, para darle un vuelco total al marcador. Para Viciedo fue su decimocuarto jonrón de la temporada, la primera en que tiene la oportunidad de jugar como titular.
Otra de las cosas increíbles e inexplicables del béisbol es el peso psicológico que puede tener un uniforme.
A.J. Burnett fue un desastre en los tres años que pasó con los Yankees, entre el 2009 y el 2011, con balance de 34-35 y efectividad rondando las cinco carreras limpias por cada juego de nueve innings Burnett pasó en el 2012 a los Piratas de Pittsburgh y ha renacido de sus cenizas, como el Ave Fénix.
El derecho de 35 años venció el jueves a los Filis de Filadelfia y alcanzó su octavo triunfo seguido y su noveno en la campaña, frente a dos fracasos, mientras su efectividad es de 3.31.
De 13 aperturas en lo que va de temporada, diez han sido de calidad, con seis o más innings trabajados y tres o menos carreras permitidas, como si al salir de Nueva York, el temperamental lanzador se hubiera quitado de encima el peso de las rayas del uniforme de la Gran Manzana. Increíble también resultó la faena del venezolano Félix Hernández ante los Medias Rojas de Boston.
El derecho de los Marineros de Seattle trabajó nueve entradas en blanco, con cinco hits permitidos y 13 ponches, mientras que John Jaso, de emergente en el cierre del noveno episodio, impulsó la única y decisiva carrera del encuentro.
Y el zurdo Madison Bumgarner estuvo a punto de lanzar el sexto juego sin hits ni carreras de la presente temporada.
El lanzador de los Gigantes de San Francisco permitió un solo imparable, con ocho abanicados, para vencer 5-0 a los Rojos de Cincinnati. La magia se rompió en el sexto, cuando Ryan Hanigan le abrió con sencillo al medio. Pero a partir de ese momento, Bumgarner retiró en orden a los siguientes 12 bateadores, para completar la blanqueada, la cuarta consecutiva para los lanzadores de San Francisco, récord para la franquicia.
Todos los reportes señalan a Puig, de 21 años, como un jugador completo, con las cinco herramientas, e incluso hay quienes afirman que el cubano estará listo para debutar en Grandes Ligas esta misma campaña, para ayudar a los Dodgers en los playoffs.
podría debutar en MLB este año con los Dodgers
Son las cosas increíbles del béisbol. En los últimos años han llegado a las Mayores unos cuantos jugadores cubanos, favorecidos con grandes contratos, aunque no siempre demostraron merecer tanto dinero.
Uno que ha justificado cada dólar que le han pagado los Yankees de Nueva York a lo largo de toda su carrera es Derek Jeter.
El capitán de los Yankees disparó el jueves un hit en cinco turnos y con ese cañonazo igualó a Cal Ripken Jr. en el decimocuarto lugar de todos los tiempos en imparables, con 3,184.
Por su parte, su compañero Alex Rodríguez, sonó dos hits en cuatro oportunidades e igualó a Brooks Robinson en el escalón 44 de todos los tiempos, con 2,848.
Sin embargo, los festejos de Jeter y A-Rod por semejantes marcas se vieron empañados por una derrota de los Yankees 4-3 ante los Medias Blancas de Chicago.
Nueva York ganaba 3-1 cuando a la hora de recoger los bates, el cubano Dayán Viciedo le botó la pelota con dos hombres en bases al relevista David Robertson, para darle un vuelco total al marcador. Para Viciedo fue su decimocuarto jonrón de la temporada, la primera en que tiene la oportunidad de jugar como titular.
Otra de las cosas increíbles e inexplicables del béisbol es el peso psicológico que puede tener un uniforme.
A.J. Burnett fue un desastre en los tres años que pasó con los Yankees, entre el 2009 y el 2011, con balance de 34-35 y efectividad rondando las cinco carreras limpias por cada juego de nueve innings Burnett pasó en el 2012 a los Piratas de Pittsburgh y ha renacido de sus cenizas, como el Ave Fénix.
El derecho de 35 años venció el jueves a los Filis de Filadelfia y alcanzó su octavo triunfo seguido y su noveno en la campaña, frente a dos fracasos, mientras su efectividad es de 3.31.
De 13 aperturas en lo que va de temporada, diez han sido de calidad, con seis o más innings trabajados y tres o menos carreras permitidas, como si al salir de Nueva York, el temperamental lanzador se hubiera quitado de encima el peso de las rayas del uniforme de la Gran Manzana. Increíble también resultó la faena del venezolano Félix Hernández ante los Medias Rojas de Boston.
El derecho de los Marineros de Seattle trabajó nueve entradas en blanco, con cinco hits permitidos y 13 ponches, mientras que John Jaso, de emergente en el cierre del noveno episodio, impulsó la única y decisiva carrera del encuentro.
Y el zurdo Madison Bumgarner estuvo a punto de lanzar el sexto juego sin hits ni carreras de la presente temporada.
El lanzador de los Gigantes de San Francisco permitió un solo imparable, con ocho abanicados, para vencer 5-0 a los Rojos de Cincinnati. La magia se rompió en el sexto, cuando Ryan Hanigan le abrió con sencillo al medio. Pero a partir de ese momento, Bumgarner retiró en orden a los siguientes 12 bateadores, para completar la blanqueada, la cuarta consecutiva para los lanzadores de San Francisco, récord para la franquicia.
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