Kanye West y Kim Kardashian protagonizaron un incidente el pasado sábado, cuando el rapero trató de romper la cámara de una paparazi tras ser preguntado por la expareja de Kardashian, el futbolista Reggie Bush.
West y Kardashian se encontraban cenando en el restaurante de Miami Prime 112, no muy lejos del Prime Italian, donde pasaban la velada Reggie con su novia, la bailarina Lilit Avagyan, con quien espera un bebé. Cuando los cuatro salieron de los respectivos restaurantes,
el músico se encontró cara a cara con Reggie, lo que supuso una situación muy incómoda para ambos.
Pocos minutos después, una fotógrafa que estaba siguiendo a la pareja le preguntó a Kanye West si se alegraba de la futura paternidad de Reggie, lo que hizo que el rapero se lanzara sobre ella para arrancarle la cámara mientras Kim Kardashian intentaba alejarlo.
Tras el momento de tensión, la pareja se marchó en su Rolls Royce.
La mediana de las hermanas Kardashian mantuvo una relación intermitente con Reggie durante dos años, y aunque estuvieron cerca de pasar por el altar, se separaron antes. Según publica RadarOnline.com,
Kardashian podría estar “molesta” por la nueva situación familiar de su expareja, porque casarse y tener un hijo es lo que ella hubiera querido conseguir con el deportista.
“Kim está molesta. Le insistió a Reggie durante mucho tiempo sobre su deseo de casarse cuando estaban juntos porque quería formar una familia con él, pero Reggie sentía que para Kim la prioridad era su fama y la televisión y él no quería nada de eso”, señaló una fuente al portal.
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