Liu comenzó su tardía carrera en la alta costura hace solo una semana, y de forma casi fortuita, pero en pocos días sus fotos, en las que posa disfrazado con peluca y gafas de sol, han corrido como la pólvora por las redes sociales, relató hoy el diario "Nuevo Pekín".
Además el anciano, que vive en un pueblo de la provincia de Hunan (centro), promociona con sus posados la más popular y glamourosa ropa entre las adolescentes y jóvenes chinas, y no tiene pudor en ser retratado con medias, en minifalda o llevando guantes de seda al más puro estilo Rita Haiworth.
Su nieta, que solo ha querido dar a los periodistas su apellido (Lu) contó que la idea surgió por casualidad, cuando invitó a su abuelo a viajar a la ciudad a Cantón, donde ella trabaja, y le enseñó algunas de las ropas de su tienda, que vende en internet.
De repente, Liu se puso una de las prendas, y al ver su nieta que el delgado abuelo tenía en realidad la misma percha que una joven veinteañera decidió convencerle para que posara como modelo, porque además ella no había encontrado a una chica adecuada para ese fin.
Desde que hace una semana las fotos del abuelo aparecieran en la red, el número de visitantes a la web se ha multiplicado por cien, y las ventas por cinco.
"Imaginé que tendría más visitas, pero nunca pensé que habría una atención tan grande", asegura la dueña de la tienda, mientras que su abuelo parece encantado con la atención mediática.
"¿Por qué no hacerlo? Ayudo a mi nieta, no pierdo nada, todos estamos contentos... a mi edad, lo hago con alegría", señaló al "Nuevo Pekín".
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