Estadísticas estremecedoras hechas públicas por las autoridades mexicanas volvieron a poner en evidencia el alto costo en vidas humanas que ha tenido la lucha contra el narcotráfico desplegada por el presidente Felipe Calderón. En total, más de 47.500 personas han sido asesinadas desde la llegada al poder del mandatario, en 2006, en actos relacionados con la violencia vinculada a los cárteles de la droga.
De acuerdo con la Procuraduría General de la República, este elevado número de muertes corresponde al recuento oficial llevado a cabo por las fuerzas del orden de diciembre de 2006 a septiembre de 2011, por lo que habría que añadir a este lamentable balance las víctimas mortales del último trimestre del año pasado.
El balance de la Procuraduría pone en evidencia que el número de asesinatos ha aumentado exponencialmente en apenas cinco años, especialmente, a partir de 2008. En diciembre de 2006 se registraron 62 homicidios y en el año 2007 se contabilizaron 2.826, según el recuento anual publicado en varios medios locales, precisó Europa Press.
Sin embargo, el verdadero estallido de la violencia se produjo en 2008, cuando se reportaron 6.838 muertos, cifra ampliamente superada por las de 2009, año en el que se produjeron 9.614 homicidios, y el sangriento 2010, en el que el total de muertos llegó a 15.273.
Aunque igual de alarmante, el 2011 dejó un ligero descenso en los asesinatos, con 12.903 muertos hasta septiembre, a los que habría que sumar los crímenes del último trimestre del año.
Las cifras no incluyen a los cientos de desaparecidos que han sido denunciados por los familiares y muchos otros que no han sido informados a las autoridades por temor a represalias de los grupos del crimen organizado.
La Procuraduría atribuye estos homicidios a la “presunta rivalidad” entre las diferentes organizaciones criminales y resalta que el 70 por ciento de los casos se concentraron en tan sólo ocho de los 31 estados mexicanos.
La lista la encabeza Chihuahua, fronterizo con Estados Unidos, con 2.276 homicidios de enero a septiembre de 2011, seguido de Guerrero con 1.533 casos, Tamaulipas con 1.153, Sinaloa con 1.100, Veracruz con 538 y Baja California con 250.
Desde que asumió el poder 2006, Calderón ha emprendido una lucha contra los cárteles del narcotráfico que ha implicado el despliegue de miles de soldados en las zonas más conflictivas de México, en lo que constituye la denominada 'ruta de la droga', que tiene como destino final Estados Unidos.
Pese a este elevado número de víctimas, la Procuraduría asegura que 2011 es el primer año en que el crecimiento de la tasa de homicidios es “significativamente menor” en comparación con lo observado en años anteriores.
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