Jenson Button «Debemos salir del box y ser fuertes», pidió el campeón del mundo del 2009, que junto a su compañero y compatriota Lewis Hamilton destapó la sábana que ocultaba un coche plateado reluciente. «Es un auto fantástico», dijo Hamilton. «Me ilusiona probarlo ya la semana que viene en Jerez», agregó Button sobre los primeros test del año. El jefe del equipo, Martin Whitmarsh, lo dejó claro: «Un auto es bonito solo si gana». Y eso es lo que quiere McLaren, que no consigue el título desde el 2008 con Hamilton. La escudería británica fue la primera entre los grandes en destapar sus secretos; Ferrari lo hará el viernes, y el domingo se conocerá la cosmética del nuevo Red Bull.
Las nuevas soluciones en el morro de McLaren son consecuencia del cambio de reglamentación, según el cual, la punta de los autos debe ser más baja, sin cambiar la altura del chasis, con lo que se quiere evitar que en caso de accidente la nariz de un coche impacte en el cockpit de otro, donde se ubica el piloto.
Los diseñadores también han tenido que adaptarse a la prohibición de los difusores soplados, por ello, la parte trasera es más estrecha. Se mantienen las soluciones laterales del año pasado, donde resalta el logotipo del principal patrocinador. «Es un día muy emocionante», concluyó Button, que parte como número uno tras lo visto en el 2011, por delante de Hamilton. McLaren tendrá a dos de los seis campeones del mundo que habrá este año en la parrilla tras el regreso del finlandés Kimi Räikkönen, número nunca visto en la categoría reina del motor. «Es el tipo de competición que queremos», dijo Hamilton sobre un plantel que incluye también al español Fernando Alonso, al alemán Michael Schumacher y a Vettel.
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