México, (PL) La tercera matanza en 10 días, atribuida a la disputa entre bandas criminales por el control de rutas y mercados delictivos, ejecutada esta vez en el estado de Nuevo León, causa hoy consternación en la sociedad mexicana.Antes, 23 personas fueron asesinadas el pasado 4 de mayo en el estado de Tamaulipas y cinco días después otras 18 en Jalisco, lo que unido a los homicidios de cinco periodistas (cuatro en Veracruz y uno en Morelos) pone la espiral de violencia en el país en uno de sus puntos más altos.
Ahora los cuerpos de 49 personas (43 hombres y seis mujeres) aparecieron desmembrados en el municipio Cadereyta, a unos 220 kilómetros de Monterrey, capital estadual, además colindante con Texas.
El móvil de las muertes, responde, según la Secretaría de Gobernación y la Procuraduría General de la República, a la guerra por el control de un territorio estratégico en el trasiego de droga precisamente hacia Estados Unidos, el mayor mercado consumidor de estupefacientes del mundo.
La protagonizan dos de las organizaciones criminales más violentas de México, Los Zetas y una alianza entre los cárteles del Golfo y el Pacífico, aseveró el secretario de Gobernación, Alejandro Poiré.
A esta batalla se une ahora otro cártel, el de Sinaloa, según expertos en crimen organizado.
La Agencia Antidrogas estadounidense afirmó que los cuerpos encontrados, así como el nivel de violencia que se aplica sobre los miembros de los grupos contrarios, en los cuales se incluye a mujeres, es un mensaje claro de lucha por el control de la zona.
"Existe un común denominador en esos mensajes: se ataca a Los Zetas o estos defienden lo que ellos consideran su área de operaciones conocida como plaza; y en éste año el nivel de confrontación con el cártel de Sinaloa y del Golfo se ha incrementado. Solo un grupo quedará vivo", refirió.
Durante una conferencia conjunta ayer, el secretario de Seguridad Pública de Nuevo León, Javier del Real, y el vocero de Seguridad, Jorge Domene, mencionaron la existencia de un mensaje amenazante atribuido al cártel de los Zetas.
Este grupo es señalado como autor de las peores masacres durante el actual gobierno, no solo de ajustes de cuentas con grupos rivales, sino también de ataques masivos contra civiles como el incendio de un casino en Monterrey, donde fallecieron 52 personas en agosto de 2011. El gobierno federal reiteró que ante este escenario la respuesta del Ejecutivo está fundada en la Estrategia Nacional de Seguridad.
Una estrategia que, a juicio de diversos observadores, no ha dado los resultados esperados.
Se estima que en los últimos seis años cerca de 60 mil las personas han perecido por motivos asociados a esta táctica y por el enfrentamiento entre grupos delincuenciales.
Por lo que apuntan estos hechos no se trata solo de una batalla ordinaria entre rivales, sino casi una guerra psicológica para advertir, amedrentar tanto a enemigos como a la población civil.
Y si el propósito es aterrar y asustar, algunos reportes de prensa publicaron que ya se tienen los primeros resultados: el diario El Mañana, de Nuevo León, anunció este lunes en un editorial que en lo adelante se abstendrá "de publicar cualquier información que se derive de las disputas violentas".
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