01 mayo 2012

Familia de víctimas de tragedia en el Bronx están en ‘shock’


Decenas de personas acuden a la casa de los parientes de las víctimas, en El Pino, a solidarizarse.Yo no lo creo que Dios se haya llevado personas tan nobles y cariñosas que eran queridos por todos aquí”. Esta frase es común escucharla por los amigos y vecinos que desde el domingo comienzan a visitar la vivienda de los esposos Jacobo Núñez y Ana Julia Martínez, en la comunidad La Jagua del distrito municipal Manuel Bueno del municipio de El Pino, en la provincia Dajabón. 

La pareja, que por tercera ocasión viajaba a Estados Unidos, falleció junto a otros cinco integrantes de su familia la tarde del domingo en un accidente automovilístico en el Bronx, Nueva York. En la modesta casa de La Jagua, decenas de personas acudían a solidarizarse, como si estuviesen los cuerpos o se trataran de rezos del velatorio.


En el accidente, ocurrido en las inmediaciones del zoológico del Bronx, también murieron María Josefina Núñez y María Codina (Nely), de 40 y 36 años, respectivamente, y las niñas Yaslin González, Naily Rosario, de nueve, y Mailyn Rosario, de tres.

Necesitan ayuda

La humilde familia solicitó ayuda para traer al país los cuerpos de la pareja de ancianos de 88 y 83 años, quienes durante 64 años permanecieron casados y procrearon 12 hijos.

Jacobo también tenía otros seis hijos, procreados con otra pareja.

Apolinar Núñez dijo que no tienen las posibilidades económicas para cubrir los gastos que conlleva el traslado de los cuerpos sin vida de nuestros padres. “Queremos tener la oportunidad de ofrecerles cristiana sepultura aquí en La Jagua, donde ellos crecieron, formaron familia y criaron a la mayoría de sus hijos”, dijo.

Desconsuelo

Ramón Núñez, otro de los hijos de la pareja, dijo que aún los cuerpos permanecen en el hospital.

“Mi papá parece que se presentía algo, la semana pasada acudió al médico a hacerse varios chequeos, pero salió bien de todos los estudios, porque era un hombre que se mantenía trabajando aún a su larga edad”, apunta Núñez. Dijo que sus padres tenían pendiente permanecer un mes y quince días de vacaciones.

El hecho ocurrió cuando María Josefina, propietaria de un restaurante, llevaba a sus padres a la casa de Rufina, otra de sus hijas, pero nunca pudieron llegar al lugar de destino.

Unidad familiar

El dolor era tan grande en María Tejada, esposa de Ignacio, otro de los hijos de la pareja de ancianos, que su único consuelo era el recuerdo de 45 años de haberlos tratado como si fueran sus padres.

Tejada solo pudo contemplar las dos fotografías colocadas en la sala con la imagen de la pareja de esposos y uno de sus hijos y entre llanto reclama que agilicen su traslado a suelo dominicano.

Manuel de Jesús Núñez recuerda los consejos de sus padres y dice que el estar pendiente hizo que todos hoy sean personas de bien, que nunca se han visto ni cerca de la puerta de un cuartel. Resalta la unidad que existía en la pareja de esposos y con sus hermanas fallecidas.
Los cadáveres serán traídos el sábado
Los cadáveres de Julia y Jacobo serán repatriados el sábado a las 6:00 de la mañana hacia la República Dominicana, según informaron familiares de las víctimas.  En tanto, el viernes serán enterrados los cuerpos de Nely y sus dos hijas y de Josefina y su hija el viernes. El jueves sus cuerpos serán velados en la funeraria Ortiz del Bronx y luego realizaron una misa de cuerpo presente.

Josefina González dejó viudo a Juan González, su compañero de 22 años de matrimonio, y huérfanos a Jonel, de 19 años, y a Jeuri, de 12. Las autoridades informaron que hoy darán a conocer en rueda de prensa el resultado de la autopsia que practicaron a los cadáveres. Josefina dejó lista la mesa del almuerzo que había planificado con sus padres que habían llegado a Nueva York el jueves de la pasada semana.
Familia prepara el velatorio y funeral
En Nueva York, la familia preparaba el velatorio y funeral de los fallecidos entre lágrimas, flashes de cámaras y continuas visitas de amigos. “Yo no esperaba un momento como éste, pero vamos a echar para adelante”, dijo Juan González, esposo de la fallecida María González y padre de la también fallecida Yaslin.

Los González intentaban superar la tragedia 24 horas después de enterarse de que la camioneta que conducía María cayó casi 18 metros (59 pies) desde el paso elevado de una autopista a un barranco en el Zoológico del Bronx. Las autoridades dijeron que la conductora del vehículo viajaba a 109 kilómetros por hora (68 millas por hora) en una autopista donde la velocidad máxima permitida era 80 kilómetros por hora (50 millas por hora).

La comunidad dominicana se reunió alrededor de la casa de los González, en el condado del Bronx. Entre llantos y abrazos, describieron a la familia como inmigrantes trabajadores que intentaban sacar adelante a sus hijos.

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