ocurrieron actos de violencia", declaró la agente investigadora de la desaparición de Yexeira, Glorimer Acevedo. En la continuación de la vista preliminar contra Quiñones Rivera ante el juez César Almodóvar Marchany, del Tribunal de Carolina, la agente detalló que habían manchas en el asiento del pasajero y en la cabina trasera de la guagua blanca tipo van, y las mismas demuestran que la persona "fue arrastrada hacia las puertas de la parte trasera de la guagua", según el informe de la interpretación de patrones de sangre preparado por la técnico del Instituto de Ciencias Forenses (ICF), Brenda Plá. Recordó que la guagua fue ocupada el 8 de noviembre de 2011, días después de que el 31 de octubre Yexeira fuera reportada como desaparecida desde el 24 del mismo mes. A preguntas de la fiscal Alma Méndez -quien representa a la fiscalía junto a Sonia Polanco-, Aquino recalcó que la prueba científica corrobora que el material genético encontrado corresponde a un perfil femenino de la hija biológica de Torres y Pacheco. La agente indicó que personal forense y ella fueron al hogar donde convivía la pareja en Villa Carolina, y encontraron manchas de aparente sangre en el pasillo, en la pileta y en piezas de ropa de mujer húmeda que estaban en una bolsa negra. "'Yo la maté, pero el cuerpo nunca va a aparecer'" Aquino destacó que el 24 de abril de 2012 estaba haciendo una búsqueda de la joven de 23 años en la laguna San José, cuando le indican que un confinado tenía información sobre el caso. Acudió a la institución penal Guayama 500 y lo entrevistó. El preso le dijo que en marzo de 2012 estaba en la cárcel de Bayamón 705 pasando por la celda número nueve del edificio 6A8, cuando escuchó a Quiñones Rivera hablando con otro recluso. "Escuchó que Quiñones Rivera dijo: 'Yo la maté, pero el cuerpo nunca va a aparecer'", relató la agente, quien confirmó que los tres sumariados estuvieron en la misma prisión para la fecha del comentario. Al entrevistar al otro confinado, este le indicó que en marzo de 2012, llega a su celda, la número nueve, y vio a Quiñones Rivera cabizbajo porque un guardia le había dicho que le iban a radicar cargos, pero que él no entendía cómo fiscalía le podía radicar un caso cuando no tenían el cuerpo. El confinado le indicó al acusado que estuviera tranquilo. "Y Quiñones Rivera le dijo: 'Yo la maté, pero ese cuerpo no va a aparecer'. Le dijo que muchos tipos la visitaban a la tienda (Candela Urban Wear) (y que) 'a mí me está que estaba con un tal "Paleta" y si estaba embarazada, yo no sé si era mío'", expresó la testigo. Destacó que ambos presos prestaron declaraciones juradas y llegaron a un acuerdo de cooperación. Los dos estaban cumpliendo dos o tres años de cárcel por apropiación ilegal y que lo que pidieron a cambio fue "seguridad para ellos y sus familias", por lo que no se publican sus nombres. En cuanto a la relación entre el acusado y Yexeira, dijo que testigos declararon que era "inestable, de constantes peleas y celos de parte de él hacia ella y de maltrato físico y psicológico de Quiñones Rivera a Torres Pacheco". Destacó que entrevistó a la persona que se identificó como "Paleta", quien negó que sostuviera una relación sentimental con la joven, sino que apenas fue a su tienda una vez como cliente. "Roberto Quiñones Rivera no informó a los familiares ni a la Policía de la desaparición de su pareja consensual en ese momento, Yexeira Torres Pacheco", manifestó la agente, quien agregó que no participó de las búsquedas de la joven y que tan pronto como el 8 de noviembre, ya estaba en Estados Unidos. Se admitieron como piezas de evidencia certificaciones de hospitales de San Juan, Carolina, Fajardo y Bayamón de que Yexeira no ha sido atendida en ninguno, y de líneas aéreas que certifican que no ha viajado con ellos. También se certificó que no ha llegado cuerpo con sus descripciones físicas y tatuajes al ICF, y que no ha habido movimiento en sus cuentas bancarias luego del 24 de octubre de 2011. Mañana, viernes, continúa la vista preliminar del acusado por asesinato en primer grado y destrucción de evidencia con el contrainterogatorio de los abogados Jorge Gordon y Orlando Cameron Gordon.
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