NUEVA YORK._ "Temí morir en el atraco", fue una de las primeras palabras pronunciadas por el taxista dominicano Julián Martínez de la base DAT en El Bronx, de 55 años de edad y quien fue herido de tres balazos que le disparó un asaltante de la raza negra activamente buscado por la policía. El chofer, narró luego de despertar del coma en cuidados intensivos del hospital Jacobi, donde se recupera de los impactos, que cuando el atracador subió a su taxi, le preguntó dónde lo llevaba y sin mediar palabra, el criminal sacó un revólver y le disparó dos veces en interior del vehículo y una tercera fuera del carro, cuando el conductor trataba de huir de la muerte.
"Pensé que me iba a matar allí mismo", sostiene Martínez a quien los médicos tuvieron que hacerle una cirugía de horas para extraerle uno de los plomos. Dos de las balas, milagrosamente atravesaron su anatomía sin afectarle ningún órgano vital.
"Salí del carro y corrí para evitar que me asesinara, pero él (el atracador) no decía nada y seguía disparándome", relata el conductor dominicano con voz temblorosa.
Uno de los plomos lo, impactó en la parte alta de la espalda, atravesó el hombro derecho y se desvió, pero fuera del taxi otro balazo lo alcanzó en el estómago, de derecha a izquierda y el plomo penetró su intestino.
El tercer balazo le rozó el lado derecho del torso. Pero el taxista criollo asegura que ese el tiro que más le duele.
Originalmente se informó que el atracador se había llevado los únicos $8 dólares que Martínez había conseguido en sus primeras horas de trabajo del pasado domingo, pero aclaró que el criminal no se llevó el dinero y tampoco su celular, "a lo mejor porque es un modelo atrasado".
Su esposa Paulina Martínez quiere que su marido deje de ser taxista y explicó que ambos ya han hablado de esa decisión. "Esperamos que se recupere para continuar hablando sobre su futuro."
Con más de 30 años en la industria del taxi, Martínez trabajaba muy duro para ahorrar dinero y poder concluir un proyecto que tiene en la República Dominicana.
Su hermano Rafael, quien también labora como taxista dijo que el despachador de la base le avisó sobre el atraco y que se comunicó con Julián al celular. "Me dijo: ven para acá que me hirieron".
Cuando llegó a la esquina de la avenida Lafayette y White Plains Road en el vecindario de Soundview (El Bronx), escena del asalto, ya su hermano estaba en la ambulancia, pero consciente y abriendo los ojos reconoció a su pariente.
El atracador, revólver en mano y apuntando, fue captado por la cámara de seguridad del taxi de Martínez y difundida en medios locales y nacionales por los investigadores que buscan ayuda de la comunidad para capturar al asaltante homicida.
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