Los oficiales allanaron la vivienda con una orden de un juez de la Corte Superior y arrestaron a Figueroa, mientras una mujer no identificada, que según la uniformada también está involucrada en el negocio sucio, no estaba en la residencia, pero se entregó posteriormente a las autoridades.
Figueroa y ella están acusados de posesión de narcóticos con la intención de distribuirlos cerca de una escuela o un parque, conspiración y reincidencia en el mismo delito.
La entidad confiscó 18 bolsas de marihuana con valor de 200 dólares y una de cocaína valorada en 500 dólares, así como nueve envolturas pequeñas. También decomisó 742 dólares en efectivo.
Los investigadores dijeron que vecinos de Figueroa y la mujer se habían quejado varias veces por el gran flujo de vehículos que se movía en los alrededores del punto y a la entrada de la vivienda.
"Esta es una cuestión de calidad de vida para los ciudadanos", dijo el subjefe de policía Donald Thompson.
Figueroa fue presentado en la corte de Haverhill en la noche y se le impuso una fianza de 20,000 dólares en efectivo.
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