La nueva derrota de los Lakers ha encendido las alarmas. El equipo angelino encajó una dura derrota en el Staples frente a Utah Jazz (110-117) que ha puesto el grito en el cielo entre los aficionados, aunque desde el equipo no se pierden los nervios y se ven capaces de reconducir la situación. Almenos así lo ve la estrella angelina Kobe Bryant, quien tras la derrota ha asegurado que "no es un problema de equipo. El problema es que no jugamos bien".
Kobe desmiente de este modo a las voces que apuntan a una falta de 'feeling' entre los jugadores y a algún mal rollo que está derivando en uno de los peores inicios de temporada de los Lakers que se recuerdan. Si bien el tropiezo en Oklahoma el viernes fue comprensible teniendo en cuenta las bajas de Nash y Gasol, el de anoche es preocupante.
"La química de equipo no es mala... Hay que defender mejor y hacer un mejor balance. Nos han metido 54 puntos en la pintura, que son bandejas", explica Kobe.
Por otra parte, el equipo espera el retorno de Pau Gasol. "Pau es demasiado importante para el equipo como para salir como suplente. Se lo ha ganado, no voy a marearlo. Sacarle desde el banquillo sería un recurso a la desesperada", ha dicho el entrenador, Marc d'Antoni. El ala-pívot catalán sigue de baja por la tendinitis que arrastra en la rodilla y según el propio técnico podría reaparecer durante la gira de los Lakers fuera de casa.
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