La ola criminal que sufre Puerto Rico dejó 19 muertes violentas, incluido un
cuádruple asesinato, el pasado fin de semana, según datos facilitados hoy por la
Policía de la isla caribeña.
La elevada cifra de asesinatos del pasado fin de semana, uno de los peores de las últimas fechas y en el que casi se dobla la media habitual, se registró inmediatamente después de la visita, el viernes, de la secretaria de Seguridad Nacional estadounidense, Janet Napolitano, a San Juan.
Napolitano llegó a Puerto Rico después de que el Gobierno local presionara ante Washington para exigir más medios contra el aumento del narcotráfico en la isla, directamente relacionado con la criminalidad causada por los enfrentamientos entre bandas por el control de los puntos de venta de droga.
La funcionaria estadounidense reconoció en San Juan que Puerto Rico sufre un nivel de violencia inaceptable y dijo que se tomarán medidas para atajar el problema, aunque aclaró que no se darán detalles para no alertar a las redes de narcotráfico internacionales que actúan en la zona.
Apuntó que los dos problemas que sufre Puerto Rico, interrelacionados, son el narcotráfico y lavado de dinero, y el de la violencia que protagonizan las bandas locales de delincuentes.
Napolitano aclaró que el incremento de la ayuda a la frontera mexicana no ha significado restarle recursos al Caribe, además de matizar que existen estrategias concretas para cada una de las dos zonas.
El gobernador de Puerto Rico, Luis Fortuño, hizo público que durante su reunión con Napolitano le comunicó que si la situación de criminalidad que sufre la isla caribeña se diera en Miami o Nueva York se trataría de un escándalo a nivel nacional.
El incidente más destacado del fin de semana fue el ocurrido en Cayey, distrito del interior de Puerto Rico, donde en la noche del viernes murieron acribilladas tres personas, a las que hay que sumar una cuarta que falleció al día siguiente que se había visto implicada en lo que parece se trató de un ajuste de cuentas.
La lista de asesinatos del fin de semana incluyó incidentes en la capital y las localidades de Loiza, Ponce, Arecibo, Río Grande y Toa Baja, entre otras.
Los 19 asesinatos del fin de semana elevan a 518 las muertes violentas en lo que va de año, 100 más que en las mismas fechas de 2011.
La elevada cifra de asesinatos del pasado fin de semana, uno de los peores de las últimas fechas y en el que casi se dobla la media habitual, se registró inmediatamente después de la visita, el viernes, de la secretaria de Seguridad Nacional estadounidense, Janet Napolitano, a San Juan.
Napolitano llegó a Puerto Rico después de que el Gobierno local presionara ante Washington para exigir más medios contra el aumento del narcotráfico en la isla, directamente relacionado con la criminalidad causada por los enfrentamientos entre bandas por el control de los puntos de venta de droga.
La funcionaria estadounidense reconoció en San Juan que Puerto Rico sufre un nivel de violencia inaceptable y dijo que se tomarán medidas para atajar el problema, aunque aclaró que no se darán detalles para no alertar a las redes de narcotráfico internacionales que actúan en la zona.
Apuntó que los dos problemas que sufre Puerto Rico, interrelacionados, son el narcotráfico y lavado de dinero, y el de la violencia que protagonizan las bandas locales de delincuentes.
Napolitano aclaró que el incremento de la ayuda a la frontera mexicana no ha significado restarle recursos al Caribe, además de matizar que existen estrategias concretas para cada una de las dos zonas.
El gobernador de Puerto Rico, Luis Fortuño, hizo público que durante su reunión con Napolitano le comunicó que si la situación de criminalidad que sufre la isla caribeña se diera en Miami o Nueva York se trataría de un escándalo a nivel nacional.
El incidente más destacado del fin de semana fue el ocurrido en Cayey, distrito del interior de Puerto Rico, donde en la noche del viernes murieron acribilladas tres personas, a las que hay que sumar una cuarta que falleció al día siguiente que se había visto implicada en lo que parece se trató de un ajuste de cuentas.
La lista de asesinatos del fin de semana incluyó incidentes en la capital y las localidades de Loiza, Ponce, Arecibo, Río Grande y Toa Baja, entre otras.
Los 19 asesinatos del fin de semana elevan a 518 las muertes violentas en lo que va de año, 100 más que en las mismas fechas de 2011.
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